URUGUAY.- (Por Edu Ruiz, Enviado especial de LAGACETA.com) Eran las 22.30 y desde el décimo del segundo del Hotel Hilton se escuchaba a un grupo que cantaba con la inconfundible tonada tucumana. Llovía en Montevideo pero los fanáticos no paraban de saltar bajo una lluvia que prometía quedarse toda la noche. La intención era que los jugadores escuchen el aliento que viajó durante horas desde Tucumán.
Los dedos de uno de los aventureros se desarmaba en el bongó y sus compañeros de ruta acompañaban con gritos de euforia. Estaban empapados, habían estado media hora bajo el agua, cubriéndose por ratos con una bandera que en las últimas horas venía guardada en uno de los tantos colectivos que llegó a la capital uruguaya repleto de tucumanos.
En ese momento, casi todos los jugadores se encontraban en sus habitaciones. La mayoría seguía el encuentro entre Palmeiras y Jorge Wilstermann, próximo rival de Atlético en la Copa Libertadores, mientras que otros pasaban la noche entre PlayStation, cartas y mates. Solo Emanuel Molina se encontraba en el lobby charlando con un amigo. Gentilmente, el "Mago" se acercó a los hinchas para sacarse algunas fotos.
Luego de cumplir con su objetivo, los "decanos" se fueron felices en la ventosa noche uruguaya, pero prometieron volver esta noche al estadio "Campeón del Siglo", odonde los de Pablo Lavallén tratarán de seguir haciéndoles emocionar.